El presidente de Rusia, Vladímir Putin, firmó este martes un decreto con las contramedidas a la imposición por Occidente de un tope de precio al petróleo ruso, prohibiendo el suministro a los que adopten esas sanciones, destaca RT.

Según detalla el decreto, no se enviará el crudo a personas jurídicas y físicas extranjeras, siempre que los contratos para estos suministros prevean directa o indirectamente la utilización de un mecanismo de limitación de precio.
Asimismo, el documento entrará en vigor el 1 de febrero de 2023 y será válido hasta el 1 de julio de 2023.
La prohibición de suministro de productos derivados del petróleo nacional se aplicará «a partir de la fecha que determine Moscú, pero nunca antes de la fecha de entrada en vigor del decreto, según detalla Prensa Latina.
Al mismo tiempo Putin se reserva el derecho, mediante un párrafo aparte, de tomar decisiones especiales sobre el suministro de petróleo y productos derivados, cuya aplicación prohíbe la disposición.
El Ministerio de Energía estará encargado de supervisar periódicamente la aplicación del decreto presidencial. También se otorgó a la entidad el derecho, de acuerdo con el Ministerio de Finanzas, a dar explicaciones oficiales sobre la aplicación de este decreto.
El grupo de trabajo interdepartamental sobre cuestiones relacionadas con el sector de los combustibles y la energía se encarga de supervisar su aplicación.
Cabe destacar que los países del Grupo de los Siete (G7) y Australia anunciaron una decisión similar.
Igualmente, los países occidentales prohibieron a sus empresas prestar servicios de transporte, financieros y de seguros a los petroleros que transportan petróleo de Rusia a un precio superior al acordado.
Fuente: Últimas Noticias